El Brécol (o brócoli) es una verdura excelente para estos dias de invierno, su contenido de vitamina C ( 116mg) es incluso mas alto que el de las naranjas (50 mg) y es también una fuente importante de calcio y vitamina A. Se puede preparar de muchas formas, su punto de cocción debe ser "al dente" porque asi conserva todas sus propiedades. Su temporada va desde octubre hasta Abril aunque hoy en dia lo podemos encontrar en los supermercados todo el año.
La receta de hoy combina el brécol con queso ligero mozzarella y se le da un toque crujiente con los piñones tostados. Yo las he servido con unos tagliatelle de arroz pero estan igualmente buenas con un poco de puré de patata o incluso solas con una salsa de yogur o de tomate.
Ponemos una olla con agua abundante a hervir. Cortamos el brécol en ramilletes pequeños y los cocinamos en el agua hirviendo durante 5 minutos, asegurandonos que quede tierno pero no demasiado blando. escurrimos y reservamos el agua para cocinar la pasta .
Con las manos formamos bolas de la masa y las colocamos sobre una fuente de horno forrada con la lámina de teflón antiadherente. Horneamos durante 30 minutos hasta que empiecen a estar ligeramente doraditas en la superficie.
La de hoy es una de esas recetas que nacen de la "vagancia" jajaja, me explico, tener una nevera medio vacia, y no tener ninguna gana de salir a comprar porque has estado todo el dia en la oficina, ya ha oscurecido y ademas llueve y hace frío, asi que toca agudizar el ingenio.
Los hornemaos durante 15 inutos asegurandonos que el huevo ha cuajado bien y el queso se ha derretido. Sacamos del horno, dejamos reposar un par de minutos y desmoldamos. Servimos acompañados de ensalada
La sopa castellana no es mas que una de los cientos de variantes de las sopas de ajo, que son, en mi parecer de las mas humildes y sabrosas del recetario clásico español. La sopa castellana se originó como comida de pastores, para superar el frío de las montañas, de ahi que tradicionalmente sean bastante altas en grasas, añadiendoles tocino, jamón, chorizo... mi versión de hoy es mucho mas ligerita, pero no por eso menos sabrosa, genial para calentar el cuerpo al llegar a casa después de una caminata en un dia de invierno.
Ponemos a calentar la cucharada de aceite en una olla, incorporamos los ajos y los cocinamos hasta que empiecen a dorarse, entonces añadimos los taquitos de jamon y el pan cortado en tiras y rehogamos bien todo junto. Lo apartamos del fuego unos segundos y añadimos la cucharada de pimentón, al hacerlo asi evitamos que el pimentón se queme. Lo revolvemos bien, lo cubrimos con el caldo y lo volvemos al fuego, siempre a fuego suave para que no rompa a hervir en ningun momento de la preparación. Cocinamos asi durante unos 5 o 6 minutos y por último añadimos las claras ( a mi me gusta icluir las claras en la sopa y servir las yemas individualmente en cada plato pero otra gente prefiere hacerlo todo junto) revolvemos bien para que se forme el hilado del huevo y servimos, preferiblemente en platos de barro , incorporando la yema en el último minuto.
El Apio nabo o apionabo es una raiz de forma redonda y de alrededor de 1Kg de peso. Por fuera es de color marrón clarito y al pelarlo tiene un color blanquecino. Su carne es dura y compacta como la de un nabo . Se utiliza mucho en los paises centroeuropeos y tiene gran variedad de usos, cocinado en sopas o como acompañamiento de carnes y en crudo en ensladas, cortado en tiras muy finas. Estos últimos años ya hemos empezado a verlo en los supermercados españoles. Su sabor es muy caracteristico, recuerda al apio pero sin tanta acidez, un poco mas suave.
En esta ocasión yo lo he utilizado para hace una crema acompañado de manzanas tipo Bramley, que tienen un toque áacido que le van muy bien al apionabo.
Pelamos el apionabo y los cortamos en tacos de 1cm de grosor aproximadamente. Pelazmos las manzanas y las cortamos en trozos.
Ponemos el aceite en una olla y cuando esta bien caliente sofreímos la cebolla, bien picadita, durante unos minutos, hasta que esté doradita. Añadimos el apionabo, la manzana y el tomillo, salpimentamos bien y rehogamos unos minutos.
Uno de mis ingredientes favoritos desde que lo descubrí por primera vez hace ya unos cuantos años es la Crème fraîche .
Se hace a partir de la nata y de agentes de fermentación o bacterias. Se elabora inyectando cultivos de lactobacillus a la nata no pasteurizada y conservando a temperatura ambiente hasta que se desarrollan y acidifican la crema. Después se pasteuriza para frenar el proceso.
En una sartén y con una cucharadita de aceite rehogamos las espinacas un par de minutos y luego las ponemos en un colador para que escurran bien toda el agua.
En un bowl salpimentamos los trozos de pescado, cortados en dados, los mezclamos con la creme fraiche y añadimos una cucharadita de nuez moscada.
El spanakopita es un pastel griego hecho con pasta filo, espinacas y queso tipo feta. En Grecia se suele tomar como aperitivo y se vende en casi todas las panaderias, como en España las empanadillas,
En una sarten con media cucharada de aceite doramos la cebolla bien troceada. Cuando este bien dorada la reservamos. Ponemos la otra mitad del aceite en otra sarten y preparamos las espinacas, añadiendoles un poco de sal, cocinamos unos 3-4 minutos, despues las sacamos de la sarten y las ponemos en un colador sobre un bol para que suelten todo el agua. 
Cuando las espinacas ya han templado las ponemos en un bol grande con las cebollas, un poco de sal y pimienta, una cucharadita de nuez moscada y los piñones, removemos bien. Desmigamos el queso feta con los dedos y lo incorporamos a las espinacas. En un recipiente aparte batimos los dos huevos, luego los vamos incorporando poco a poco a la mezcla de las espinacas, para que queden jugosas pero no demasiado liquidas (no es necesario usar toda la cantidad de huevo si vemos que esta suficientemente jugoso).
Introducimos en el horno durante 40 minutos , cuando este dorado lo sacamos, cortamos en cuatro trozos y servimos acompañado de ensalada
El risotto es un plato típico del norte de Italia que consiste en una base de arroz cocinada en caldo hasta que tiene un punto cremoso. A diferencia de cuando preparamos paella en el risotto si que revolvemos el arroz mientras se cocina. Tambien el tipo de arroz utilizado es diferente, en la paella utilizamos normalmente arroz tipo Bomba y en el risotto utilizamos Arborio.
En una cazuela calentamos el aceite, añadimos los ajos y sofreímos hasta que estén doraditos, incorporamos las gambas y las doramos también, salpimentamos. Añadimos el arroz y lo revolvemos bien con las gambas y el ajo para que coja sabor.
Si queremos añadirle un toque extra podemos espolvorear con parmesano en el momento del emplatado (no os olvideis de puntuar si lo haceis!)
Los domingos es normalmente un dia de descanso, de preparse para la semana que empieza, y, sobre todo en los meses mas fríos de sentarse enfrente de la tele y ver nuestras series favoritas ( ami, por ejemplo me encanta Downton Abbey) y nada mejor para acompañar estas tardes "vagas" que una taza de café y un trocito de tarta o bizcocho, no?. La que traigo hoy es de pera, no excesivamente dulce y muy sabrosa, espero que os guste.
Preparación:
Pelamos las peras, las cortamos en trocitos, como de 1cm, y las introducimos en la masa asegurandonos de que están bien repartidas.
Esta receta no es que sea muy complicada, pero es bastante laboriosa y lleva tiempo con lo que es genial para hacer en un dia de esos de lluvia en los que te apetece encerrarte en la cocina (bueno, al menos a mi me pasa), salen 6 porciones generosas con lo que si la preparas el fin de semana te puede solucionar un par de dias de comidas para llevar al trabajo.
Preparación:
Mientras tanto escogemos suficientes hojas de repollo para cubrir nuestro molde, de forma que sobresalgan un poco por los lados, ponemos agua con un poco de sal a hervir y escaldamos las hojas para reblandecerlas un poco unos 7 minutos, las sacamos, las pasamos por agua fría , las secamos con papel de cocina y las alisamos con el rodillo un poco . Primero forramos el molde con papel de horno para que sea mas fácil el desmoldado y luego cubrimos el fondo y los laterales con las hojas de repollo.
En una sartén bien caliente ponemos la cucharada de aceite y sofreimos los 3 dientes de ajo junto con 150 gr del repollo restante bien picadito. Cuando el repollo ya esta algo dorado añadimos la nata, el tomillo y un poco de sal y pimienta y cocinamos hasta que rompe a hervir, entonces apartamos del fuego. Cuando ha enfriado ya un poco le incorporamos los dos huevos batidos y el queso ahumado rallado.
Cogemos una fuente honda un poco mas grande que nuestro molde , ponemos el molde dentro y añadimos agua hirviendo hasta que alcance la mitad de altura del molde. Llevamos al horno durante 60 minutos. Al pasar este tiempo comprobamos que esta bien cuajado, sacamos del horno y dejamos reposar unos minutos, luego desmoldamos y servimos.
La receta de hoy es otra de esas fáciles ,fáciles, perfectas para una cena al llegar de trabajar cuando no nos apetece pasarnos una hora en la cocina. Yo he utilizado queso de cabra en esta ocasión porque me quedaba un trocito de la receta del otro dia, pero está igualmente bueno con queso mozzarella si el sabor del de cabra os parece un poco fuerte.
1 Berenjena de tamaño mediano(0pp)
Precalentamos el horno a 180C. Cortamos la berenjena en rodajas de 1/2 cm de espesor y las pasamos un par de minutos por la sartén (yo utilizo el teflón asi que no pongo aceite). Cortamos en rodajas el tomate . En una fuente para horno ponemos en el fondo la lámina de teflón y encima empezamos a preparar los montaditos, en mi caso he hecho: una capa de berenjena, una de tomate, una de berenjena, una de queso, una de berenjena, una de tomate , una de berenjena y terminando con queso, en cada capa espolvoreamos unas poquitas hierbas de Provenza para darle sabor y sobre la última salpimentamos .
Sacamos y servimos
Esta receta me la dio una amiga que es vegetariana, y si como a mí os gusta el comino ya vereis como no dejais de hacerla una y otra vez.
La semana pasada estuvimos de vacaciones en el sur de Irlanda, en el condado de Kerry, en una isla preciosa llamada Valentia. Para los que esteis pensando en visitar Irlanda os recomiendo no perderos esta parte del país, los paisajes son realmente espectaculares, las gentes amables , los pueblos llenos de encanto ... Irlanda en estado puro.
La población de la isla no es muy elevada aunque aumenta en los meses de verano porque muchos irlandeses e ingleses tienen alli una casa para las vacaciones. En la isla hay dos pueblos, Chapeltown y Knisghtstown, en Chapeltown hay un pub y la iglesia católica mientras que Knightstown tiene un hotel, un pub, un par de restaurantes, una tienda y la iglesia protestante.
La isla es ideal si te gusta pasear por el campo, pescar, disfrutar de la naturaleza... el paseo hasta el faro es visita obligada, una vez alli puedes hacer una visita guiada (nada especial la verdad, lo único que merece la pena son las vistas desde el balcón del faro). Otro paseo precioso es el de Bray Head, en la parte de la isla que se adentra mas en el Atlántico, es un paseo de una hora u hora y media y las vistas son inmejorables.
Para alojamiento puedes escoger entre el hotel o varios B&B's, los precios de estos suelen andar alrededor de los €35 por persona y noche, o si vuestra estancia va a ser mas larga alquilar uno de los preciosos cottages disponibles, esta fue nuestra opción y pagamos €340 por una semana.
Esta receta que traigo hoy es completisima, tiene carne, verduras, pasta, queso... y aún asi su contenido de propoints no es muy elevado . Es el típico plato que te va a confortar en un dia de bajón, perfecto para estas primeras tardes otoñales en la que recordamos con nostalgia los dias calidos del verano.
30gr queso de cabra (3pp)
Precalentamos el horno a 180C. Cortamos la berenjena a la mitad ( a lo largo) y con la punta de un cuchillo bien afilado hacemos cortes diagonales sobre la pulpa. La introducimos en el horno 15-20 minutos y al sacarla la vaciamos con la ayuda de una cucharilla, reservamos la pulpa.
En una sartén ponemos las dos cucharaditas de aceite y cuando esté bien caliente sofreímos el ajo, cortado en laminas finas, incorporamos el solommilo de cerdo coratdo en tiras y luego añadimos el puerro en rodajas, el tomate en trocitos y la pulpa de la berenjena, salpimentamos y dejamos pochar unos 5 minutos.